Los agentes de la Policía Local de Eivissa han interpuesto dos denuncias a establecimientos por vulnerar el horario de cierre y han levantado cinco actas por consumo de alcohol en la vía pública y otras dos por tenencia de sustancias estupefacientes.
La Policía Local de Eivissa ha desalojado a unas 800 personas del Puerto, sa Penya y la Marina, que permanecían en la zona pasadas las 2.00 horas, tras el cierre de los bares de copas y restaurantes, causando molestias al vecindario, con música, cánticos y algunos de ellos consumiendo alcohol en la calle.En el desalojo también han colaborado agentes de la Policía Nacional.
La intervención se ha llevado a cabo durante un dispositivo especial para el control del botellón e infracciones de la normativa COVID-19.
Los agentes de este dispositivo, formado por unidades tanto de paisano como uniformados, han denunciado además a dos establecimientos por vulnerar el horario de cierre. Asimismo, la Policía ha permanecido en la zona para evitar que los responsables y operarios de los establecimientos no vendieran alcohol a los clientes una vez cerrados.
Durante la actuación, la Policía Local ha denunciado a 5 personas por consumo de alcohol en la vía pública y a otras 2 por posesión de sustancias estupefacientes. También se han intervenido tres altavoces, formulándose la correspondiente sanción por infracción a las ordenanzas municipales.